Una nube híbrida es un tipo de informática en la nube que combina la infraestructura del entorno local, o una nube privada, con una nube pública. Las nubes híbridas permiten que los datos y las aplicaciones de tu organización se muevan entre los dos entornos.
Estas ofrecen a las organizaciones opciones de flexibilidad operativa y financiera. Las empresas pueden ajustar el uso de sus gastos de capital y gastos operativos, según la demanda de cargas de trabajo y los requisitos del presupuesto y el centro de datos.
Una arquitectura de almacenamiento de nube híbrida les permite a los responsables de TI elegir entre una serie de ubicaciones para almacenar diferentes tipos de datos con diferentes requisitos de acceso.
La nube híbrida le admite a las organizaciones elegir en qué nube almacenar su carga de trabajo crítica y su carga de trabajo menos importante, haciendo posible tener mayor control de los datos que deben estar protegidos.
Una plataforma de nube híbrida ofrece muchas ventajas a las organizaciones entre ellas las siguientes:
1. Flexibilidad.
2. Estructura y separación.
3. Seguridad de los datos
4. Elimina tareas y procesos repetitivos y redundantes.
5. Facilita el control y acceso a los datos más sensibles.
La nube híbrida está evolucionando para incluir también cargas de trabajo perimetrales. El proceso perimetral aporta la capacidad informática de la nube a los dispositivos IoT, más cerca de donde residen los datos.
Actualmente, las empresas eligen un enfoque de nube híbrida por las exigencias de sus negocios, como cumplir los requisitos de cumplimiento normativo y mando de los datos, para así lograr sacar el máximo partido a la inversión en la tecnología del entorno local o solucionar problemas de latencia.
Con las tecnologías actuales cada vez más organizaciones requieren servicios en la nube, contáctanos y te diremos cómo hacerlo posible.